Cuando descubrí que no era quien creía ser...

Ayer asistí a una conferencia sobre coaching de la mano de Silvia Guarnieri, y aunque dijo muchas cosas interesantes, hubo algo que aún resuena en mi cabeza y produjo un cambio importante en mí, o por lo menos eso quiero pensar.


Todo empezó con una anecdota. Nos contó que hace tiempo ella pensaba que nunca tendría un perro. Creía que no podría soportar tener en casa un animal sucio, que lo llenaría todo de pelo… Pero su hija le insistió tanto que acabaron teniendo uno (del que se ocuparían su marido y la niña). Al poco tiempo de tenerlo, el perro enfermó y ella no sabía ni que hacer para que se recuperara. Lo pasó realmente mal. El perrito ya reconocía el ruido de sus tacones cuando llegaba a casa, se había integrado y ella no soportaba verlo mal. En ese punto pensó: no soy la mujer que pensaba que era. ¿Cuántas mentiras más me he creído sobre mí misma? Pensaba que jamás podría tener un perro y ahora mírenme... A partir de ahí empezó a mirar las cosas desde otro punto de vista. Siempre creyó que no tenía madera de emprendedora y se embarcó en negocios, etc. etc.


Esa historia me hizo pensar en una frase que espero releer con frecuencia: NO soy todo aquello que he intentado sinceramente y no conseguí. Puedo llegar a ser todo lo demás.

Comentarios

  1. Hola, soy el administrador de Bettasgalicia y te he contestado el correo que me mandaste (más vale tarde que nunca) jaja
    Un saludo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario